
Una écfrasis tremenda del fresco de Masaccio en la capilla de Brancacci.

Lo que duramos en silencio (To što bešumno trajemo) de Ernest Fišer.
No podemos llamar vida a lo que perdura en el silencio:
nosotros necesitamos la fe
nos es indispensable la fraternidad
unión silenciosa con las cosas que no alcanzan las palabras
necesitamos una concentración fuerte y real del corazón
reunir los cauces débiles que hacen un río fuerte.
Nosotros necesitamos un fuego fuerte y genuino
que arda alegremente allá donde estuvo la ceniza
como la vieja felicidad que retoña
tan apasionada en la libertad como bajo las restricciones.
Si pacientemente perduramos es sólo por el anhelo
de una vida plena:
nosotros necesitamos silencios sabios y amplios
espacio poblado de humanidad
desesperado de amor y esperanza
necesitamos espontaneidad de espíritu hecha realidad
nosotros necesitamos el bosque que aprecia sus árboles solitarios
y los cuida igualmente en flor y en su podredumbre
La primera nieve (Prvi snijeg), de Nikola Đuretić
Desde la pieza caliente
que huele a canela
el crepúsculo junto a la ventana
es un intruso.
Si no hubiera grandes
emplumadas motas,
que lentamente se hunden
a través del
óleo oscuro
¿cómo sabríamos
que los ángeles celestiales,
que los diablillos jubilosos
esta noche juegan con
sus almohadas?
De ninguna manera pude encontrar tiempo libre (Nikak se dočasiti), de Božica Brkan
me acosté recién en viernes
antes no tuve tiempo
de ninguna manera pude encontrar tiempo libre
hubo quince carros de hierba para secar y llevar
no se trata de poca cosecha de heno
me lavé la cara y me peiné
anteayer
el lunes
me sepultaron
pienso
que estoy tan cansado como la tierra negra
y que no tendré ganas de levantarme
de la fosa profunda
ni el día del juicio
me haré el sordo y no oiré
la trompeta
Plenilunio croata (Hrvatski tunat), de Drago Štambuk.
Vuela el mago
por el mar de la noche azul
en vez del ahuecado ángel
y el flujo de las luces desde una balandra
apunta a la superficie encrespada
tentando redondas caballas.
No puedo dejar
de pensar en el mar
como en un osario de los peces,
en el cual un canto antiguo
limpia y blanquea toda la basura,
transformándola en plateados
hongos y en grava de la playa.
¿Te abrazaré nuevamente
hasta la boca hundido en la muerte
como en el mar, nadando
a media fuerza – solamente para
mantener la cabeza en la superficie,
contando tardíos besos:
sorbos salados
de la cresta de las últimas olas?
Que sea lo que sea (Neka bude što bude), de Dunja Detoni – Dujmić
Te vas por el campo que un millón de años
fue untado de colores negro y blanco:
tu pie izquierdo y el derecho despacio
oyen como la espalda cruje bajo los pasos,
como el perro salta sobre las aguas corrientes,
a través de las hierbas que se mecen y
que escaparon sus cabezas a último momento.
Cada paso termina demasiado rápido
hace lo suyo y desaparece;
mejor reconoce que no sabes mucho de eso
y que no estás tan bien de la vista.
Y mientras piensas se multiplican los campos,
en alguna parte tierra negra, en otra sólo broma sin gracia,
tus pies las amarran,
el izquierdo va para arriba, el derecho de lado,
el muerto por el vino,
del bien al problema,
y que todo esté listo,
sin estúpidas despedidas,
listo para que descubras la razón,
para descascararlo hasta su esencia.
Y entonces que sea lo que sea
Tomados de Encuentros. Poesía croata contemporánea, selección y traducción de Željka Lovrenčić (Escarabajo editorial; 2018).
Una écfrasis tremenda del fresco de Masaccio en la capilla de Brancacci.
Pensamientos viajeros en un encierro invariable.
Primera traducción al español por Camilo Del Valle Lattanzio
Los autores hablan sobre el proceso creativo y el contenido simbólico de su propuesta, que hace un firme llamado a recordar.
El poeta ante la fosa común es agua verde / sangre de la sequedad / antes habitada por ojos y horizontes
En este ágil escrito Iván Andrade nos enfrenta con los tremendos horrores de la Primera Guerra Mundial, la Gran Guerra.